El oro continua sin inmutarse ante la crisis económica y sigue cotizando al alza, alimentándose de la desconfianza y la debilidad del dólar. Muchos son los analistas que apuntan a que la onza de oro podría llegar a cotizarse el próximo año a 1.600 dólares.
China continúa presionando al alza el precio del oro. No en vano, se ha convetido en el mayor productor de este metal del mundo, y ahora, amenaza con desbancar a India como el mayor consumidor también de esta materia prima, en los próximos tres o cuatro años. La razón: la fuerte demanda del dorado para piezas de joyería y para inversión. Las reservas oficiales en China, según el último informe, ascienden a 1.054 toneladas.
Por países: China, India, Rusia y Brasil continúan cambiando dólares por este metal. Algo que favorece que su precio se dispare al alza. Además de las expectativas de un aumento de la inflación, que reaviva el interés por comprar oro. Por ello, no es de extrañar que el banco central del gigante asiático apueste por flexibilizar la regulación vigente. Así los bancos podrán comprar y vender oro. Además de conseguir que más firmas puedan tener acceso al mercado del metal precioso.
Y se imponen nuevos productos, como los lingotins o minilingotes, que muchos consideran pueden convertirse en el regalo estrella estas navidades. El total importado de estas pequeñas piezas de oro, se sitúa entre un 70 y un 80% este ejercicio. Algo que indica que la mayor parte de la demanda a día de hoy procede de inversores particulares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario